12.4.17

La poesía revolucionaria del Gordo Marcos

Eduardo Pérez Silveira, un salteño que pagó con su vida el haber integrado el MLN, es uno de los agonistas de Gavazzo. Sin Piedad.
A Pérez Silveira, a quienes sus compañeros llamaban "el Gordo Marcos" lo mataron y desaparecieron en 1974 en circunstancias que el libro relata y explica. Tenía 24 años. La última vez que se lo vio fue en el Hospital Militar. Según la versión que da el propio Gavazzo, lo llevaron allí de urgencia porque padecía una crisis respiratoria provocada por una granada de gas que él mismo le tiró dentro del cuartel de Artillería 1, conocido como La Paloma. Otros testimonios establecen, que más allá de la granada, a Pérez Silveira se lo torturó con saña en ese cuartel, donde Gavazzo era el segundo jefe.
Eduardo Pérez Silveira, Gordo Marcos, MLN tupamaros, Gavazzo Sin PiedadLos que leyeron el libro saben también que el Gordo Marcos escribía canciones y poemas. Pero no pudieron leer ninguna de sus obras porque los familiares y amigos entrevistados habían perdido todo registro de aquellos versos.
Sin embargo, hace unas semanas, uno de los amigos de Pérez Silveira, Juan Chiriff, me llamó para darme una noticia: él sí conservaba algunos escritos del Gordo Marcos.
En aquellos años, Chiriff había anotado con lapicera en un cuaderno las composiciones de su amigo. Y hasta hoy ha cuidado de ese cuaderno como un tesoro: "Yo lo admiraba", me dijo. "No porque era guerrillero, sino porque lo quería. Sin ser homosexual, yo amé a ese hombre. Era más que un hermano".
Su testimonio y los poemas encontrados de Pérez Silveira permitirán ampliar la próxima edición del libro. Adelanto aquí tres de ellos que, como todos, son fiel reflejo de una época y del modo de sentir de los jóvenes que se sumaron al MLN.


Como me duele
ay tu ser, en agonía
cómo enfría mi mente,
la tuya, prostituta y madre
todos los instantes
Como me calientan
los vericuetos de tu
fantástica experiencia... paupérrima
y esos seres que creas... al fin
inconcebibles
sus genitales vírgenes
cabezas putrefactas
cómo me duelen

Cómo sufro
los exóticos jardines
que toman forma en ti
y se van en el aire
ideas palidísimas
ornamentadas siempre
de infinitos, lánguidos brazos
y el disfraz
que las cubre
de colores radiantes
y los sombríos rincones
donde a veces te escondes
y tus inmensos ojos
y tu rostro
tan dulce, tan inocentemente irónico

Cómo me revuelvo
cómo me caliento
cómo te conozco
y...
ninguna lágrima
solo una carcajada
y después...
recordar que tus inmensos ojos
nunca vieron
morir un niño
deshidratado,
ni falta de medicamentos
reventar una anciana
ni los "pueblos perdidos"
Recordar
que tus manos suavísimas
nunca escarbaron tierra
ni tocaron la escarcha
ni la bichera de una oveja
ni las tetas de una vaca
ni un pico
ni una pala
ni un torno
ni una fragua
ni un martillo
Recordar
que en los vericuetos de tu mente blanca
no existen torturadores
que revientan los güevos
siembran choques eléctricos
"sueros de la verdad"
disparan por la espalda
maniatan y escupen a la cara
y después se maquillan la propia
para hacer uso
de cualquier pantalla
o carraspean sobriamente
y escupen mierda
en alguna radio,
que lucen sus mejores galas
y adoptan poses
para los fotógrafos
de los grandes diarios
Que pagan con mendrugos
una vida
que reparten tarjetas
para "leche barata"
o "carnet de pobreza"
y dan limosna

Y recordando,
entonces...
ya vislumbro
y comprendo
¡Sé por qué no soportas
a tu hermano guerrero!

¡Cómo te perdono!

...y si es necesario
en seguida te mato!
y después que me juzguen
... ¡si es necesario!!


***

POEMA SIMPLE

Hoy tengo a mi derecha
y frente al mundo,
las dos mujeres
que alguna vez soñé
y que no quise nunca
Y bebiéndome ¡el mundo!
con los ojos
y gastando a conciencia
kilómetros de espacio
bebe todo mi ser
la horrible angustia
de no tener a mi izquierda
y frente al mundo
la única que puedo
compartir a conciencia
kilómetros de espacio
para beber ¡la vida!
con la carne y el alma

***

RUTINA

Ay, de tu voz
delgado estilete
que lastima mis tímpanos...
rutina

Ay, de tu cuchicheo infernal
poderoso boomerang
alado,
que pasa lastimando
y vuelve

Ay, de tu cara lavada
y tu insípida boca
ay de tu corto camino
tu cuerpo incoloro
y tu entraña gomosa

Ay, de tu voz
inmundicia dulzona
que repite incansable
escóndete
tras la buena mentira,
que no te encontrarán
y serás libre

Ay rutina inconsciente
sé que detrás de ti,
está tu muerte,
y sé que te desgarro
si doy un paso al frente
¡¡Y te desgarro y grito!!
...mi triunfo...
a los que estructuraron
tu mansedumbre inconcebible
inerte...

Y si en ellos revives
un poema
entre los labios
tengo...
¡Una hoguera en las manos!
Y si canto, despierto
Y cuando canto, hiero
Y cuando toco, entibio
Y cuando quiero, quemo


Gordo Marcos, Eduardo Pérez Silveira, MLN



1 comentario:

  1. Mi abuela, su tía, hermana de la madre de Eduardo, también amaba escribir y cantar. Lo quería mucho, y siempre lo recordaban con tristeza, ella y mi abuelo. Que lindo leer esto. Se sabe muy poco de ellos, que tan jóvenes desaparecieron.

    ResponderEliminar


Últimos comentarios

Páginas vistas

Etiquetas

accidentes de tránsito Alejandro Atchugarry Alemania Alimentación Álvaro Moré Amodio Pérez Ancap Andes Argentina Artigas aviación Bicentenario Bolivia Brasil Caraguatá Carlos Koncke; Alejandro Vegh Villegas Carlos Liscano Cesáreo Berisso charrúas Che Guevara. Checoslovaquia Chespirito - Roberto Gómez Bolaños Chueco Maciel Ciudad de la Costa Comunidad Jerusalén Creative Commons Crónicas de sangre sudor y lágrimas Crónicas y reportajes Cuba Cultura Daniel Castro Daniel Vidart Daniel Viglietti delincuencia Democracia Derechos humanos diarios dictadura Doble discurso europeo Drogas Eduardo Galeano Eduardo Pérez Silveira. Libros educación El Chavo empleados públicos Engler Enrique Tarigo entrevistas ETA Evo Morales Fernández Huidobro Fernando Parrado financiamiento de los partidos políticos Fito Páez Fuerzas Armadas Fútbol Gabriel Ohanian Gabriel Pereyra Gavazzo Gente que no sabe leer y tergiversa lo que uno escribe Gerardo Caetano Grasas trans (transexuales) guaraníes Günter Wallraff Herencia maldita Historia historia reciente Historias tupamaras Historias uruguayas. Hotel Carrasco Hugo Alfaro Hugo Batalla Hugo Bianchi Intendencia de Canelones internet Israel Italia Jaime Roos Jorge Batlle Jorge Lanata Jorge Zabalza Jose Mujica Juan Salgado La República Leonardo Sbaraglia Liberaij Libros Libros. Liber Literatura Luca Prodan Luis Almagro Luis Lacalle Luis Lacalle Pou Madonna Maltrato animal Maracaná Marcelo Estefanell Mario Benedetti Medicina Medio ambiente México Michael Jackson Miguel Ángel Campodónico Milicos y tupas MLN-T Montevideo Música Neber Araújo Nelson Sosa nombres raros Óscar Padrón Favre Oscar Tabárez Pablo Cuevas Paco Casal Palestina Paraguay Partido Colorado Partido Comunista Paz Peñarol periodismo periodismo cloacal Perú PIT-CNT Plagios y otras situaciones dudosas Pluna Política Política uruguaya Pollo homosexualizante Primavera de Praga publicidad Racismo Radio Raúl Sendic redes sociales Relato Oculto Renzo Pi Hugarte Roberto Canessa Rock sabihondos Salud Sin comentarios Sindicalismo sindicatos Sirios en Uruguay Sobre lo políticamente correcto Sonia Breccia Sumo Televisión Tenis terrorismo tortura trabajo Twitter Uruguay Venezuela Víctor Hugo Morales. Violencia doméstica Visto y/o oído zoológico

Atención

Los derechos de los textos
publicados en El Informante
pertenecen a Leonardo Haberkorn.
No se permite la reproducción
sin autorización del autor.